DUNE (1984)

DUNE (1984)

Dirigida por David Lynch. Escrita por Frank Herbert. Adaptada al guión cinematográfico por David Lynch. 

Protagoniza Kyle MacLachlan, Virgina Madsen, Francesca Annis.

Durante muchos años se quería adaptar cinematográficamente la novela de Herbert, sin embargo no se podía. Llegó el momento en que cobró mucha relevancia, y le encomendaron la gigantesca tarea a Alejandro Jodorowsky, pero no se logró concretar. A pesar de eso, el proyecto de Jodorowsky proyectaba lo que habría de ser una tremenda obra maestra pues en el proyecto estaban los mejores talentos de Hollywood y artistas legendarios como Salvador Dalí y bandas impresionantes como Pink Floyd. Pero no se concretó. A pesar de esto, mucho del trabajo que realizó Jodorowsky sirvió de base para proyecciones como Star Wars. 

Tiempo después, el proyecto caería en las manos de la familia De Laurentiis; incluso la película está dedicada a Federico De Laurentiis. 

La familia de Laurentiis encomendó la visión cinematográfica a David Lynch. 

Yo quedé intrigado por saber por qué esta obra de Herbert había cautivado a mentes que justamente dentro del arte están atraídos y comprometidos con el desarrollo de la conciencia, con elevar la conciencia de la humanidad.¿Qué tipo de información estaba abordando Herbert dentro de su obra? Al revisar un pco al respecto, me  di cuenta que la obra en sí es bastante compleja, fina y robusta en diversos temas de la vida humana, como política, filosofía, poder, gobierno, economía, dinero, misticismo. 

Todo este gran conocimiento robusto dentro de la obra, tenía que ser condensado en una primera entrega por David Lynch. Aunque sabemos con certeza, que Lynch hace cine de su autoría, respetando por completo su interpretación sobre el universo; no para mercados ni consumo desmedido; Lynch es un artista cuyo cine demuestra la cosmovisión del autor. En tanto, así justamente construyó la narrativa de «Dune», bajo su propia mística. 
Lynch narra el camino de un joven hasta lograr el despertar de su interior. Tiene argumentos y líneas emblemáticas, parlamentos memorables, escenas increíbles, un cine y portentoso. Que a pesar de las dificultades técnicas en el momento por lograr grandes efectos especiales, la película logra colocarse como un producto verdaderamente de culto. Y en sí, la película ahora es un producto de culto. Sin embargo, en su momento de estreno fue un fracaso. Pero tendría que ser un fracaso para poder trascender en el séptimo arte. 

El hijo de Duke lidera a un ejército de guerreros en contra de un emperador de la galaxia que se conoce, para dar nuevamente libertad a una tierra explotada, porque posee, entre otras cosas, la especia más cotizada del universo, para hacer viajes por el espacio; una especia que ayuda a expandir la conciencia y a tener dominio sobre el universo entero. A pesar de esto, no es tan fácil conseguir la especia en un planeta que es puro desierto, donde nunca ha llovido, donde nunca ha habido agua, y estas vida inhabitable produce tremendos obstáculos para conseguir la especia, eso y otros gusanos gigantes que deambulan por el desierto defendiendo la tierra y el consumo desmedido de esta sustancia que quiere sobre explotar la raza humana. 

Paul Atreides se prepara para una lucha que viene, pero comienza a dar signos que es el mesías, el gran líder que estaba esperando el universo para poder alcanzar la libertad. Paul Atreides comienza la búsqueda por hacer despertar a su ser interior, después de que muere su padre y él queda al frente de una lucha revolucionaria por acabar con el imperio que domina al universo, un imperio corrupto y abusivo. La paz y la justicia vendrían de la mano de Paul Atreides. Paul comienza a tener sueños premonitorios de lo que viene en su futuro en su línea del tiempo. 

Frank Herbert, el autor de DUNE, se sabe que escribió una novela para ahondar más en la verdad sobre la luz del verdadero mesías. Alusiones habría de que el verdadero despertar y la verdadera luz reside en aquel de corazón justo y sincero, pero no se ve a los ojos de cualquiera quién es la verdad y cuál es la mentira. Para saber la verdad hay que acabar con el mundo de las apariencias, el mundo donde aparenta tener la verdad los demagogos, los fanáticos, los estafadores, los espectadores inocentes. Herbert habría hecho una gran crítica al ejercicio del poder político. 

Lynch, cuentan, habría de tratar de adaptar la obra completa, que demasiado vasta, al cine en una sola entrega de poco más de dos horas. 

Paul Atreides da perfectas lecciones de cómo vencer el miedo a través de la narrativa que nos van contando de su vida, cómo renuncia al miedo y toma el camino del amor, y crece en amor, y nunca para de seguir ascendiendo en el amor. 

A mí me parece una película imperdible.

Perfecta.

Ahora, viene el nuevo estreno de una nueva adaptación cinematográfica de la novela de Dune, que presumiblemente dicen los críticos, esta sí está a la altura de lo que merecía la novela, y no como los esfuerzos anteriores hechos por Lynch o en la serie de televisión que llegara a protagonizar Susan Sarandon. Indudablemente, ahora bajo la dirección del gran Denis Villeneuve y un reparto espectacular con nombres como Timothée Chalamet, Zendaya, Oscar Isaac, Javier Bardem, Josh Brolin, se espera algo legendario. 
De cualquier manera, todos estos esfuerzos siempre nos remiten a un acto fundamental: leer la novela de Frank Herbert.

Erick Xavier Huerta