Little Buddha

 

El Pequeño Buda 

(1993)

Después de la muerte del Lama Dorje, un monje tibetano busca a tres niños que cumplen con los signos de reencarnación del Lama Dorje, uno norteamericano y dos niños nepalíes.

Dirigida por Bernardo Bertolucci.

Keanu Reeves interpreta a Siddharta. Bridget Fonda es Lisa Conrad, Ruocheng Ying es Lama Norbu. Chris Isaak es Dean Conrad.

A través de interpretación de sueños, los monjes tibetanos encuentran signos que rastrean las posibles reencarnaciones, en este caso del Lama Dorje. De tal manera, que comenzamos con el viaje del Lama Norbu a Norteamérica para buscar a este niño que sería la reencarnación de Lama Dorje. Este niño (interpretado por Alex Wiesendanger) comienza a mostrar signos reveladores que dan la posibilidad a ratificar el hecho. 

Los monjes tibetanos tienen toda una cultura tradicional para lograr corroborar sus hallazgos, su búsqueda. Los niños recuerdan vidas anteriores, que pueden corroborar con objetos que usó en vida el personaje al que se busca. Con entrevistas y diálogo, se encuentra si en verdad el infante es la reencarnación de quien habría de volver para ejercer su liderazgo espiritual y ayudar a otros a que puedan encontrar el camino de iluminación, para que pueda ayudar a otros a sanar y a desarrollarse en el campo espiritual para avanzar en su proceso de evolución. 

Bertolucci, maneja de forma poco peculiar la narrativa cinematográfica de esta historia. Utiliza dos colores sobresaturados en la imagen. Utiliza el color azul sobresaturado y muchas sombras cuando nos narra la historia del niño norteamericano, como si se tratara de un sueño. Y utiliza el color sobresaturado del naranja cuando se trata de la historia de los niños nepalíes, un niño y una niña que pudieran ser la reencarnación del Lama Dorje. A los tres niños, el Lama Norbu les cuenta la historia de Siddharta (interpretado por Reeves). 

La historia de Siddharta, la imprime Bertolucci sin saturación de colores, como si fuese la verdadera historia, la real, la fábula mística del hombre que alcanzó la iluminación.

Siddharta era un príncipe, que poseía juventud, riqueza, belleza; que gozaba de todas las comodidades. Estaba casado y tenía un hijo. Pero su padre no quería que Siddharta tuviera atención sobre las cosas que él consideraba feas del mundo: la pobreza, la muerte, la vejez. 

De pronto un día, Siddharta mira que hay pobres, y va en busca de ellos. Se encuentra también con la vejez, y la muerte. Decide abandonar a su esposa y a su hijo y a su vida cómoda y llena de riquezas para encontrar una solución ante esas temáticas que de pronto se perciben llenas de tristezas. Siddharta se une a los ascetas, que práctican la filosofía para purificar su espíritu a través de la negación de los placeres materiales. La ascética es un modo de acceso místico. 

Siddharta pronto logra niveles de meditación asombrosos, que le convierten en líder de los ascetas. Pero un día sucumbe a probar comida que le han ofrecido pues le han visto muy débil. Con esa acción pierde el liderazgo de sus seguidores, pues le consideraron débil. Siddharta en cambio le había ofrecido ese arroz para compartir con sus seguidores pero no funcionó, se quedó solo. 

En su meditación, acabó con sus más profundos miedos, eliminó toda dualidad de él, y se consagró en el pleno absoluto, convirtiéndose en el Buda. 

Lama Norbu, tuvo que llegar entonces a decidir quién de los niños era la reencarnación de Lama Dorje. Pero Bertolucci definió el desenlace de esta historia advirtiendo la chispa divina y la infinita posibilidad de que todos y cada uno de nosotros posee esa alternativa, de lograr tomar el camino de la evolución de nuestros espíritus alcanzando ese estrado de posibilidad de ser un guía espiritual para todos los demás que los necesitan. Por eso, Lama Norbu requirió finalizar dando la posibilidad a los tres de ser la propia reencarnación de Lama Dorje. 

La película, me parece, la carga por completo el personaje de Lama Norbu (interpretado magistral y emotivamente por Ying Ruocheng).

Muy emotiva.

Vale completamente la pena por la narración de Bertolucci sobre la vida de Siddharta. 

Erick Xavier Huerta