LAST CHRISTMAS

LAST CHRISTMAS

Yo fui para ver a la hermosa Emilia Clarke. Y justamente Clarke es la película.

Paul Feig dirige esta película. Conozco el trabajo de Feig por «bridesmaids»,"damas en guerra"—muy divertida, y aquí de nuevo, Feig, logra darnos un producto muy entretenido y divertido y emotivo. A diferencia de "bridesmaids", Feig aquí respeta los principios de dirigir una película para toda la familia que además tiene misiva de tocar corazones y dar un mensaje sobre la generosidad, la bondad y el amor. lo logra con creces. Hay que remarcar el hecho de que además detrás de esta película esta la propia producción de la gran Emma Thompson. 

Es muy divertido el humor que escribieron y que actúan, con la propia Thompson actuando como madre del personaje que interpreta Emilia Clarke. Es una película multifacética a pesar de estar narrada dentro del contexto navideño y de encauzar al mensaje a este tipo de coyuntura. Pero el mensaje es atemporal y poderoso. Emilia Clarke interpreta a una chica que es narcisista y nadie está a su altura, y por ello prácticamente acaba de indigente, por no saber agradecer, por su arrogancia y su egolatría, deambula por la calle, cargando su orgullo. Debiera aprender de humildad. Aquí aparece el personaje de Tom, extraordinariamente planteado y ejecutado por Henry Golding.

Esta película catapultará a Golding como una gran revelación del cine a nivel mundial, pues Holding cuenta apenas con unos cuantos trabajos como actor y en esta película roba cámara y hace un estupendo trabajo co-estelar junto a la hermosa y bella y poderosa Emilia Clarke. 

Clarke es espectacular.

Simplemente espectacular.

Clarke plantea la multidimensionalidad de su personaje con una facilidad impresionante, una ejecución con sutil fina maestría. Es una chica llena de apegos, complejos y actitudes compulsivas. Alejada del perdón, de ser un corazón noble, tiene conflictos con casi todo el mundo. No quiere volver a casa, no gusta de su relación con sus padres, con su hermana, y de igual forma, tiene conflictos con los amigos que le tienden la mano para que pueda salir adelante. Pero Kate no sabe agradecer, y se queja amargamente por todo lo que le pasa en la vida. No sabe recibir, y así lo iremos constatando a lo largo del trayecto en esta narrativa cinematográfica. 

Para saber dar, hay que saber recibir.

Nadie puede dar lo que no tiene. 

Qué más poderoso mensaje, que el descuidar de todos los corazones, porque todos podríamos ser uno, porque somos uno, y el mismo, porque tú corazón es el mío, y mi corazón es el tuyo.

Tal vez, después de esta película, podríamos comprender mejor aquello de amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos.

Una gran película. Hace saber valorar. Además está cobijada por la gran música de George Michael. 

Y nuevamente, aparece Emilia Clarke.

Una película de amor.

Súper recomendable.

Erick Xavier Huerta