GANDHI

GANDHI

Siempre son las cosas sencillas las que nos impresionan.

Ama a tu prójimo.

A Mohandas Gandhi, su pueblo lo bautizó como alma grande. 

Nada excusa la violencia. 

Nada justifica la violencia.

No existía causa por la que Gandhi estuviera dispuesto a matar.

Gandhi hacía plegarias para salvarse. Porque su salvación era salvación de la humanidad.

Ben Kingsley tuvo una epifanía, «debo ser actor». Y de pronto, su primer protagónico en el mundo cinematográfico, fue interpretar a Gandhi. 

Fue Richard Attenborough quien lo eligió para interpretar al hombre de alma grande. Recordarán a Attenborough por también actuar en las películas de Steven Spielberg «Jurassic Park» como el profesor John Hammond. Attenborough es un gran actor, porque es un gran director, de tal manera lo reconoce el propio Spielberg a quien gusto el deleite de dirigir para honrar su carrera. 

Attenborough dirigió la espectacular película «Gandhi» (1982), obra maestra para honrar la vida de uno de los hombres que cambió el destino de la humanidad. 

La transformación espiritual, física de Kingsley al interpretar la vida de Gandhi durante el filme, es espectacular. Tanto es así que ese trabajo actoral le valió los premio Bafta, globo de oro y el Óscar por mejor actuación estelar masculina. Lo ganó todo. Y no hay película a la fecha que pueda superar ese legado cinematográfico que construyó Attenborough. 

Gandhi se casó a los trece años, y mantuvo su matrimonio hasta el final. Dentro del matrimonio alcanzó se desarrolló espiritualmente. Estudió derecho en Londres, y vivía muy bien. Pertenecía a la clase acomodada, pero en uno de sus viajes de trabajo a Sudáfrica, sufrió la discriminación, el racismo, y el clasismo que permitía y solapaba el imperio británico. 

Hay muchos niveles de lectura que realizar en los aspectos que se estaban fraguando y que se vivían dentro de ese contexto histórico en la región europea, de Africa y de la India, y cómo Gandhi vino a sacudir todo el mundo por las injusticias que políticamente eran aceptadas en toda la región. 

Desde Sudáfrica comenzó su lucha. Estuvo preso, y después regresó a la India. Se reencontró con su pueblo, y observó la injusticia salarial, las condiciones precarias en las que el poderoso imperio británico tenía al pueblo de la India. 

Gandhi era un hombre de poderosas convicciones y un ejemplo para el hacer político. Por eso fue un gran hombre, por su poder como político, como libertador, como rebelde, como filósofo, como líder espiritual. Gandhi sabía que debía ser espejo al injusto para observe su propio error, y no contestar con el mismo error, pues eso enmascara el error. Violencia que se contesta con violencia, no se puede percibir, nadie la puede observar. De tal forma, que Gandhi convenció a todo el pueblo de la India a caminar por la no violencia, para hacer ver el error de los británicos, que no respetaban y que no entendían la injusticia que estaban cometiendo contra semejantes. 

Gandhi decía que debemos tener el coraje de soportar la ira ajena. 

Gandhi decía que la pobreza era la peor forma de violencia, y eso justamente había promovido el imperio británico en la india británica, decir qué consumir, qué vestir, qué comprar, qué ser, cómo ser, qué alcanzar, y qué juzgar como riqueza y qué como pobreza. Que mereces y que no mereces, era dictado por el imperio británico. El imperio británico, y sus grandes empresas habían generado desigualdad, hambre e injusticia; por ello Gandhi arremetió contra esos corporativismos diciendo que "la tela más fina no es la más bella si provoca hambre e infelicidad".

Gandhi sabía que los corporativos del imperio habían desplazado las grandes habilidades locales, para producir riqueza, y ello había introducido una auto-insatisfacción de realización dentro del pueblo indio.

Por ello comenzó el movimiento de lucha por la independencia de la India para liberarse del Raj Británico. Y la lucha, era por medio de la no violencia, porque era una causa justa ante la injusticia que perpetraba otro pueblo con mucho más poder económico, militar y político y que tenía bajo el yugo a la India. 

El embate contra Gandhi fue atroz, y lo buscaron golpear por medios de comunicación, desprestigio social, chismes, amenazas militares, políticas. Pero Gandhi salió airoso. 

La Corona británica gobernaba a la India, y permitía la discriminación, el clasismo, el racismo, muchas de las cosas que vemos hoy día. Pagaban mal a los trabajadores y vivían en condiciones deplorables todos los hombres y mujeres de la india. Ante tal escenario, Gandhi, no veía que trataran con el mismo respeto a todos los hombres y mujeres gobernados por el Imperio, por eso se volvió anti-imperialista. Con tales convicciones, Gandhi convocó a no consumirles nada a las empresas británicas. Gandhi se volvió un hombre peligroso para los enormes intereses económicos. 

No usaremos su ropa, no compraremos sus productos. Gandhi con tal convicción hacía su propia ropa, y se vestía como los injustos presos políticos que tenía el imperio. Por sus convicciones, y por sus principios, levantaba un gran movimiento de rebeldía en contra de la corona británica y de sus primeros ministros que siempre buscaban cómo meter a Gandhi a prisión.

Gandhi encarnaba y era ejemplo vivo de los principios que y convicciones, de sus creencias. 

El ejemplo arrastra. 

Y Gandhi, ante la mezquindad y la oprobiosidad que surgía en su pueblo cuando no aguantaban más no ser violentos, Gandhi se avergonzaba de ello, e incurría en huelgas de hambre para purificar y cuidar su aura, de no verse nunca como sujeto de motivación para que surjan entre sus seguidores los peores sentimientos de odio y egoísmo. 

Gandhi vino en un momento clave para la humanidad. Consiguió la libertad para su pueblo, y le enseñó a su pueblo a ser libres, libres dentro del imperio, y a luchar y a conseguir la libertad colectiva. Y si no hubiera sido por esa resistencia, los pueblos imperialistas continuarían haciendo atropellos y jactándose de la humillación y del abuso en contra de otros pueblos que han mantenido colonizados. Gandhi vino en un momento clave para la humanidad. Gandhi consiguió la libertad de su pueblo antes del gran estallido de la segunda guerra mundial. A pesar de que Gandhi mostró el rumbo a la humanidad, las grandes potencias económicas querían la guerra, y no osaban luchar por esa vía de la no-violencia. Ellos querían matar, y accedieron a enmascarar la violencia respondiendo a la violencia. Ellos querían matar a Hitler, y mostrarle que podían ser más violentos que él. Y así ocurrió la segunda guerra mundial, violencia contra violencia, violencia y más violencia. 

Los problemas de la India, después de alcanzar la independencia, eran por motivos de falta de comprensión, por falta de comunicación y respeto entre ellos, entre hindúes y entre musulmanes. La división de sus costumbres, creencias y principios dividían a los pueblos que integraban la India. Por eso luego, buscaron sus propios destinos, los pueblos de Pakistán, Bangladesh y Birmania.

A Gandhi lo asesinaron.

Gandhi murió asesinado cuando toda su vida pugnó por no ser violentos. 

Hasta la fecha, hombres y mujeres del mundo no han aprendido a que la violencia no se debe responder si es que queremos evolucionar en nuestra conciencia.

En toda la historia, el camino de la verdad y el amor siempre triunfó.

Erick Xavier Huerta