KLAUS

Sergio Pablos y Carlos Martínez López dirigen «KLAUS».
Sergio Pablos escribe y adapta el guión a esta animación cinematográfica espectacular, que verdaderamente le da una lección a disney.

Los designios de dios son misteriosos.

Sergio Pablos le demuestra a Disney los alcances de la animación, con un formato mucho más humilde, con una historia poderosa, convirtiendo a esta película en una clásico de la animación, del cine.

¿Cuántos caminos nos pueden conducir hasta el amor?

Es una grata y portentosa experiencia, «KLAUS». Llena de corazón y de amor. Justo lo que necesitábamos en esta época. Yo estaba un poco renuente a ver esta película, pero al verdad me asombro. La admiré como si fuera un niño otra vez. Y además toca el corazón con una ternura mágica e inolvidable.

Pablos dirige como un legendario. Es uno de los grandes. Aquí verdaderamente pisa el sendero de las leyendas de la animación, y ocupa un lugar majestuoso y privilegiado, por el logro que ya hemos podido presenciar.

Klaus aborda el misticismo que envuelve a la gran figura de Santa Klaus.
Hay escenas verdaderamente legendarias, inolvidables, poéticas, impresionantes. La animación y la humanidad de cada personaje es verdaderamente profunda y entrañable.
Se contextualiza, se justifica y se aborda una historia de la que hemos sabido durante años, y de las que nos han contado en miles y cientos de películas animadas y teatrales, pero nunca habíamos presenciado esta narrativa poética. La historia de Klaus, un hombre que vive en el polo norte, que había seguido el camino de su corazón, que tenía un sueño profundo y que ese sueño de pronto parecía que nunca iba a ocurrir, pero los propósitos del destino son más grandes que nuestros sueños, y Klaus acabará por ser más generoso, y por dar más amor que aquel que alguna vez pudo imaginar un día.

En eso se resume la película, en que un acto generoso siempre provoca otro. Que una nación que se levantó y se fundó en el odio y el rencor, puede revertir su destino, sus consecuencias, si abordamos otra actitud, si cambiamos las intenciones. El amor puede vencer, el amor puede convertirse en destino.

Es una película maravillosa.
Llena de amor.

Inolvidable.

Erick Xavier Huerta