HACKSAW RIDGE






Vuelve Mel Gibson, y vuelve a no decepcionar.

Mel Gibson es un gran director, y lo vuelve a confirmar.

Y es mejor director, porque Mel Gibson osa demostrar que con pocos recursos puede armar grandes obras maestras. A pesar del maquillaje, los actores, el reparto y la producción pudiera mostrar una película de enorme presupuesto, la verdad, es que no. Mel Gibson utiliza eficientemente sus recursos. 

Porque no existe un gran fotógrafo detrás de la película ó recursos en edición, cinematografía, por decir algo. Y justamente creo que esos son los errores en la película. Si esta película contara con un buen fotógrafo, una realización en la cinematografía más bella, mejores efectos especiales en pantalla verde, y más calidad en la edición, sería una obra magnífica. Pero no. Me parece que toda la grandeza de la película radica en el ingenio de la dirección de Mel Gibson.

Mel Gibson se acomoda bien al trabajo de los guionistas, la comprende, y la pone en su justa dimensión; por eso la hace tan entretenida. Pero, además, Gibson emprende la película desde una baja emoción hasta un climax excelso, y lo sabe muy bien Gibson, en eso estriba su gran ingenio, su enorme labor como Director desde que realizara la obra maestra de corazón valiente.

Tiene un buen trabajo en la sonorización y no se mete en problemas como vestuario, realizadores de la musicalización y arte. Por eso les digo, es eficiente, metódico y directo. Que a mí, en particular me molestan muchos de los ajustes en edición que hace desde la pasión de cristo. Barre muchas imágenes cuando pone en secuencias lentas algunos de sus shots, como cuando bajan a cristo de la cruz y como, cuando bajan en camilla al personaje principal de esta película. Así también, cuando los niños suben a la cima de la montaña, se miran pantallas verdes y molestan a un cinéfilo como puedo ser yo.

Dicho eso. Mel Gibson marca muy bien los lineamientos de sus actores, les gesta emotividad en sus puestas en escena. Mel Gibson es un tremendo director en plasmar la inocencia y la sinceridad frente al terrorismo, el dolor y lo sangriento que pueden ser las personas cuando no toman conciencia del daño que pueden efectuar a través de distintos niveles de violencia para culminar en su máxima expresión que es, la de la mutilación al cuerpo a través de los golpes, del castigo, del uso de las armas.

Andrew Garfield nos presenta una buena actuación. No merece el óscar. Se acomoda a la orden estricta de Mel Gibson por interpretar su visión, sí, a la perfección, como gusta Mel Gibson, en esa justa atmósfera que hemos visto siempre, desde luego, en la representación que él mismo tuvo en corazón valiente.

Hay buenas actuaciones.

Pero lo que más nos asombra, sin duda, es el trabajo de Gibson. No sale en pantalla pero es una película donde se muestra el rigor y la fuerza del director, al tanto, que creo que hay un consenso de jamás haber visto tal experiencia cinematográfica en materia de guerra.
Gibson pone al espectador dentro del escenario de guerra. Lo vives, lo experimentas, lo sufres. Percibes todo el rigor de lo que representa una guerra en el caos, en donde no habita la razón ni las ganas por sobrevivir, el azar y la desgracia y el infierno son la atmósfera de hombres que creen en el honor y en la fuerza pero que jamás llegan a imaginar la terrible y atroz experiencia de lo que es padecer la guerra en un su profunda esencia. Nadie lo puede iamginar hasta que lo vive y Gibson lo retrata en su máxima cruda interpretación.

Además de todo. Gibson rebela una consgina fundamental, la reflexión más profunda del terrible padecimiento de un ser humano con una conciencia limitada. Que la mayoría goza de una conciencia sin lucidez, al punto de la cruda realidad, que la mayoría es capaz de actos atroces y que por esa principal premisa, se debe jurar hacer todo lo posible por no tocar extremidades, instrumentos, herramientas que pongan en juego la vida de los demás, porque somos reactivos, porque antes de transitar a una conciencia lúcida, debemos mirar, fijamente, en el nivel de percepción en el cual nos encontramos; porque si no puedes dominar y tener cuenta de lo que experimentan tus pensamientos, tus emociones y tus sentimientos, serás capaz de realizar actos atroces, fuera de libertad, abonando al caos y al dolor.

Una película fuerte.
Una experiencia inolvidable.

EXHS

Comentarios

Entradas populares de este blog

The Room Next Door

Nosferatu

A Real Pain