One Life

Quien salva una vida, salva al mundo entero.

Anthony Hopkins no para de trabajar y sigue cosechando éxitos en su filmografía.

Ahora llega “One Life”.

Esta es la increíble historia de Sir Nicholas “Nicky” Winton, un joven que en tiempos de la segunda guerra mundial, salva a más de 600 niños de los Nazis en Checoslovaquia.

Esta es una película genial.

La dirige James Hawes y es escrita por Lucinda Coxon, Nick Drake y Barbara Winton. Está en la tradición de la lista de Schindler, pero habla cómo en esos tiempos de tremenda oscuridad para la humanidad, hay conciencias que iluminan, y muestran su gran brillo. Es el caso de Nicky Winton, una persona tremendamente sensible. Winton da con uno de los campos de concentración donde tienen a familias Judías en Praga, Checoslovaquia, y están en terribles condiciones. Winton encuentra a los niños en pésimas condiciones, en la miseria absoluta, y los niños se acercan a él, y no tiene que darles, un retrato en su psique le hace despertar un tremendo coraje y determinación por salvar a estos niños de esas condiciones que les ha impuesto la guerra para darles y salvaguardarles en mejores condiciones de su calidad de vida mientras pasa la guerra, así salva sus vidas. No puede ser indiferente ante esos casos. Pero evidentemente, no lo hace solo, su madre le ayuda de sobremanera, y cuando todos piensan que nada es posible hacer, Winton mantiene la fe y contagia de esperanza a sus colaboradores y a su propio país, Inglaterra. Por eso se convierte en un líder, un líder que comanda toda una operación para salvaguardar la integridad de los niños en tiempos de guerra, y así consigue solidaridad y fraternidad, para salvara tantos se pueda en el menor tiempo posible. No piensa que sea ningún mérito servir a sus prójimos, sino que es su deber. 

Sin embargo, el tiempo apremia, y las condiciones empeoran, Winton lamenta que no pueda salvar todas las vidas. Al transcurrir su vida, no sabe qué sucedió con el paradero de esos niños. Su caso vuelve a estar presente en la opinión pública, y en el ocaso de su vida, se reencuentra con todas las vidas que salvó, cientos de niños que ahora son adultos le agradecen que tuvieron una existencia gracias a su iniciativa que tuvo coraje y determinación en contra de la injusticia y la guerra. Cosa de gran enseñanza para saber las implicaciones de cómo usar la política para bien, y no para mal. 

El trabajo de Hopkins es impecable y te lleva hasta las lágrimas. 

También el trabajo de Helena Bonham Carter como Babi Winton me parece sobresaliente. De igual forma, ver a Romola Garai en pantalla es un deleite. 

La película de James Hawes hace especial énfasis en las grandes cosas que ocurren, cuando personas ordinarias se atreven a lograr lo extraordinario. 

También, cuando buscas servir para dar más vida a tus semejantes, la vida te recompensa Winton vivió por los 106 años e hizo siempre bien al mundo. Y sirvió siendo él mismo.

Imperdible.

Erick Xavier Huerta