The Equalizer 3

The Equalizer 3


Parece que la mafia es como el cáncer y no tiene cura.


El tiempo del ocaso. El invierno en la vida de Robert McCall.

Llega esta tercera entrega, desenlace de quien ha cometido justicia por su propia voluntad. El coraje, y la determinación de hacer justicia en la tierra, sin esperar a nadie, sin buscar ayuda. Robert McCall se aventura a su final.

Dirigida por Antoine Fuqua, escrita por Richard Wenk, Michael Sloan, y Richard Linheim. 

Protagoniza el legendario Denzel Washington, junto a la gran Dakota Fanning. 

El director de fotografía es el legendario Robert Richardson, un maestro de maestros en el cine. Ha ganado tres premios de la academia, y ha sido siete veces nominado al oscar por su cinematografía. Ganó el oscar por su trabajo con Oliver Stone en JFK, y luego ganó su segundo y tercer oscar, con el aviador de Martin Scorsese y con Hugo de Scorsese. 

Trabajó con Tarantino en Kill Bill, en Inglorious Basterds, once upon a time in Hollywood.

Soy fan de la saga y este fue un gran final, espléndidamente dirigido por Fuqua. 

Aquí Robert McCall se convierte en la mismísima muerte, dando a cada quien su merecido por las injusticias que perpetran malvados a inocentes. 

Pero además de todo, la película se centra en la narrativa que explica cómo grupos del crimen organizado se apoderan de la provincia, con ejemplo ahora de lo que está ocurriendo en Italia, y cómo estos grupos del crimen organizado extorsionan, amedrentan y quitan la libertad a los pueblos, a la gente. Robert McCall se está recuperando en una bella provincia de Italia y se enamora del pueblo y de su gente. Al tiempo ve cómo uno de estos grupos empiezan a azotar y a robar la tranquilidad de las familias de este bello pueblo. Está harto y no lo permitirá. 

La película también apunta la necesidad de los pueblos de unirse para combatir y hacer frente al crimen organizado.

La justicia viene en manos de Robert McCall haciendo sufrir a los verdugos al mismo nivel en que han actuado durante este tiempo en la tierra. Su karma, su consecuencia les hace padecer aquello que nunca imaginaron. 

Pero lo que das, recibes. 

Estamos en el lugar en el que debemos estar.


Una película espléndida, y contada con una tremenda sutileza, sobre la calidad del tiempo y su apreciación en el tiempo del ocaso, en el tiempo donde hay más paciencia, pero no tolerancia para que McCall siga observando la contaminación del mal en el mundo.


Además, una gran aportación de Dakota Fanning, recordando esta mancuerna de «hombre en llamas», ahora vislumbrando cómo Washington le da pase a las nuevas generaciones. Dakota Fanning interpreta muy bien a Emma Collins, un agente importante de la seguridad nacional de Estados Unidos de Norteamérica que requerirá de la ayuda de McCall para poder cumplir una misión que trasciende, no solamente en ámbitos judiciales, sino en la propia historia de McCall, una deuda que saldar con sus más queridos amigos. 



Imperdible.

Erick Xavier Huerta


Comentarios

Entradas populares de este blog

The Room Next Door

Nosferatu

A Real Pain