The Wonder

Dirigida por Sebastián Lelio.

basada en el libro de Emma Donoghue y adaptada al cine por Sebastián Lelio.

La película comienza haciendo un apunte cognitivo sustancial «estamos hechos de historias» y las historias que nos contamos ocurren en nuestro escenario interno de conciencia, y eso promueve la configuración de nosotros en nuestra actitud y en la forma en cómo nos vinculamos con nuestro entorno.

Esto es lo que experimenta Anna O'donnell adentrada en el modelo cultural de su familia y en esta fantasía que de pronto también le sirve para escapar de la realidad. ¿Qué necesita Anna? Requiere la reconciliación con su intra biografía, una reconciliación que le permita eso, salvarse así misma, liberarse así misma de sí misma, por esta personalidad que construyó subordinándose a las expectativas y requerimientos de su familia. Busca su identidad, y al no encontrarla, cae en la falsa personalidad, una que de pronto atenta contra su propia vida y le hace caer en una espiral de involución maltratándose ante sí, con la idea de que está consiguiendo purificarse y cuyo sacrificio (un suicidio) le propiciará la salvación. 

Ante tal calamidad, un periodista de la región vislumbra muy bien el hecho, y lo documenta con hechos y hace importantes críticas a esta situación que padece esta familia en una comunidad que proyecta signos que se replican en otras partes por la especial coyuntura que vive el país en esa época. 

Al tanto, lo que me gustó tremendamente de esta película es justamente esto, que se trata de una historia de amor, un amor que salva las biografías de todos nuestros personajes cuando ocurren, en sintonía, reflejarse en este asunto crucial, el amor. Porque el amor nos lleva a expandir nuestro ser y a rescatar nuestro ser para nuestra evolución. Bueno, y es que el personaje que interpreta magistralmente Florence Pugh (Lib Wright) es también la búsqueda de reconciliación con su intra-biografía. Wright está buscando re-significar su pasado, encontrar el sentido que tuvo su pasado, porque está atravesando un proceso de duelo, de una importante relación significativa. 

Al mismo tiempo, Tom Burke, que interpreta al periodista Will Byrne, acaba por enrolarse, también por su intrabiografía, en este proceso de reconciliación que de pronto reúne a todos en la fundación de una nueva familia, que se edifica en el perdón y en el amor. Un mensaje tremendamente portentoso.

Es una película muy emotiva, que capa a capa que vamos desvelando en esta narrativa, descubrimos el tremendo corazón y el amor que hace conjugar a personajes que estaban destinados a encontrarse para fundar una nueva céula, un nuevo gremio, una nueva familia, una nueva sociedad.

The Wonder es una película esperanzadora, que pugna por la justicia y el amor.

Imperdible.

Erick Xavier Huerta S.