Nomadland 

“Lo más extraño es que no sólo aceptamos la tiranía del dólar, la tiranía del mercado. Lo aceptamos. Y con mucho gusto nos sometemos y vivimos bajo su yugo toda nuestra vida. Se me ocurre una analogía, es como si fuésemos un caballo de trabajo. Un caballo de batalla que está dispuesto a trabajar hasta la muerte. Para luego ser puesto a pastar. Eso es lo que nos pasa a muchos de nosotros. Es como si la sociedad nos estuviera tirando a la basura y luego nos enviara como los caballos a pastar”.

Bob Wells

 What's remembered, lives.

Escrita y dirigida por Chloe Zhao. 

Nomadland ganó tres importantes oscares: mejor actriz, con Frances McDormand, mejor dirección con Chloe Zhao y también mejor película. Nada más y nada menos.

Ciertamente la película es tremendamente contemplativa, para narrar fundamentalmente el tema de la pérdida y cómo impacta en un ser humano, en este caso, la experiencia que observamos a través de nuestro personaje principal «Fern».

Nos damos cuenta que quienes adoptan el estilo de vida nómada, en los Estados Unidos de Norteamérica, han tomado la decisión por un duelo central; han perdido a seres amados, estilos de vida, patrimonio, empleos. 

«Fern» es interpretado magistralmente por la gran Frances McDormand.

Fern consigue trabajos temporales a través de una ruta, para no echar raíces en ningún lugar. Quiere moverse, no quiere estar en el mismo lugar. Detrás de estos actos y de esta vida de viaje, se encuentra un duelo, la pérdida del ser amado. Fern acaba de perder su matrimonio por la muerte de su amado esposo. De pronto la vida cambió drásticamente. ¿Cuánto perdió Fern en su vida? Perdió un estilo de vida, perdió al ser que más amaba, perdió su vida conyugal y de pronto busca ya no estar en ese hogar que ahora es otra cosa, otro lugar pues era el espacio que compartía con el ser amado. Fern entonces decide volverse una mujer nómada, y dejar aquel lugar de tantas memorias, de tantos recuerdos, porque ya no es esa vida, porque ha desaparecido el ser que más ha amado. Pronto, en el trayecto de Fern, vamos dando cuenta cómo su lugar de siempre, su hogar permanente reside en su corazón. 

De hecho es una de las líneas principales al principio del filme, apuntando que el hogar reside en el corazón. 

Nunca nos movemos de nuestro escenario interno de conciencia. 

Fern está en busca de clarificar su mente. Nunca se mueve de su verdadero hogar, el centro de su propio ser. No puedes ir más lejos en la vida que al centro de tu propio ser. 

Uno de los personajes centra el mensaje: «lo que más amo de esta vida es que no hay un adiós final». Nuestros personajes no tienen que despedirse. Buscan, a través de esta práctica de supervivencia, asimilar el desapego. Disfrutan compañías pasajeras, disfrutan trabajos temporales, disfrutan de espacios y paisajes transitorios. Aprenden que los momentos son transitorios, que deben vivirlos al máximo, y no se lo van tomando tan en serio, aunque viven cada momento y cada instante con mayor pasión. 

Centran el mensaje, en que lo que más aman de esa vida es que pueden decirle a la gente que conocen que los podrán ver en el camino, y no hay despedida. Y pueden pasar meses, un año o más años y saben y han corroborado que se vuelven a ver. Hay reencuentros. Aprenden que el reencuentro se da. 

Además de todo esto, la película hace una importante crítica al capitalismo, sobre todo tomando de punto de partida la gran recesión desprendida del año 2008, donde mucha gente perdió su patrimonio, perdieron mucho, perdieron empleos, perdieron estilos de vida, perdieron ilusiones. Hubo y siempre existen grandes duelos cuando las economías se desploman, y más una como la de esta potencia poderosa del mundo, lugar donde buscan los sueños.

Hay un resentimiento por esta cultura que les indicaba que todos sus ahorros los invirtieran en una deuda por adquirir bienes que no pueden soportar, como una casa. 

El anillo es un círculo que simboliza que no hay fin. El anillo significa que el amor nunca termina, que tu amor nunca tiene fin. 

Fern está procesando un gran duelo. En esta travesía y nuevo estilo de vida que se da como nómada, encuentra un amor. Tiene un enamorado, hay una oportunidad que le brinda la vida para disfrutar del amor con una pareja una vez más. Esta situación es un cuestionamiento a su conciencia, misma que le ha deparado resolver que aún no está preparada para vincularse íntimamente con alguien más otra vez, al menos no en este tiempo, porque su ciclo aún no ha cerrado. 

Fern no está lista para echar raíces, y menos para afrontar de pronto otra pérdida. No quiere un amor de pareja pasajero de un día, dos, un mes o dos, un año o dos. A ella le ha gustado la vida matrimonial, le ha gustado tener una pareja con quien echar raíces. 

Este es el proceso que está enfrentando. 

La película está llena de simbolismos para remarcar el mensaje fundamental: siempre estamos y habitamos nuestro hogar, siempre estamos aquí y ahora en nuestro escenario interno de conciencia. Nunca nos movemos de ahí.

Lo más lejos que podemos llegar en la vida,

es al centro de nuestro propio ser.

Me parece una. magnífica película y un trabajo impresionante de Frances McDormand, muestra maestría en poder interpretar lecturas sobre la humanidad. Al mismo tiempo, el reconocimiento es merecido para Chloe Zhao, por su guión y su dirección, una de las grandes promesas de hollywood, de los directores de la nueva era. Y es que Chloe Zhao muestra una inmensa valentía al imprimir paciencia, y una tremenda y fina calidad de atención y observación a contemplar las emociones humanas.

Magnífico filme.

Erick Xavier Huerta S. 

«Los recuerdos viven».

Carol: I see that you have this ring. Are you married?

Fern: I am, but my husband died.

El anillo es un círculo que nunca termina y significa que tu amor nunca termina. 

“Le encantaba estar ahí, todo el mundo lo quería. Así que me quedé. Misma ciudad, misma casa. Como decía mi papá: «Los recuerdos viven». Quizás pasé gran parte de mi vida recordando a Bob”.

Fern a Bob Wells sobre su fallecido esposo.