Sound of Metal

Sound of Metal (2019)

Dirigida por Darius Marder.

Escrita por Darius Marder y Abraham Marder. 

Protagonizan, Riza Ahmed, Olivia Cooke, Paul Raci.

Riz Ahmed interpreta a Ruben, un joven que se dedica a tocar la batería en conciertos de «heavy-metal», pero cuando comienza a perder el sentido de su audición, comienza a experimentar con profundidad lo que significa el camino del desapego. 

Todo ocurre por primera y última vez. 

Ruben tiene tatuado en su pecho «please kill me» (por favor mátame), ahí justamente donde se ubica el corazón, donde se centra el potencial emocional. En sus manos tiene tatuados calzones, y la palabra «NO». Ruben tiene signos de tatuajes en el cuerpo que muestran, que indican una rebeldía ante la existencia, ante la vida. Son mensajes de no aceptar la vida.

Ruben estaba apegado a un modo de vida, a un estilo de vida. Andar por carreteras de Estados Unidos de Norteamérica, de concierto en concierto, junto a su novia Lou (Olivia Cooke). Y tienen muchos proyectos, y aspiraciones, pero todo se viene abajo cuando pierde su audición. ¿Ahora qué puede hacer? Ruben no acepta el principio de realidad, no acepta lo que ha sucedido. Hay un proceso de duelo. El duelo significa el proceso de aceptación de algo que ha terminado. Ruben busca una solución práctica para resolverlo y regresar al estilo de vida que estaba llevando. Ruben de pronto comienza a experimentar el duelo, de perder la capacidad de oír, de escuchar el mundo, de percibir el mundo a través de esa dimensión auditiva que nos da uno de los sentidos en el cuerpo humano, el oído. 

Y se dedica a la música. De pronto Ruben no sólo debe aceptar que ha perdido su audición, sino también una pasión—«la música», su modo de vida, su modo de sustento de vida, y también la manera en la que se comunicaba con el mundo. Todo cambia radicalmente para Ruben. El duelo es la aceptación de algo que ha terminado, y para Ruben se ha terminado la característica común que tienen muchos para percibir el mundo a través de la capacidad que permiten sus oídos.

El último duelo que todos habremos de padecer, es la despedida que nos hacemos de nuestro cuerpo humano, el vehículo que se nos prestó para poder percibir este mundo a través de cinco sentidos fundamentales: oído, tacto, vista, olfato y gusto.

Muy pronto, su novia Lou se da cuenta que la crisis los ha rebasado, y que está afectando profundamente el bienestar de Ruben. Él requiere ayuda. Lou consigue un lugar para que puedan ayudar a Ruben con su problema, pero este se rehúsa porque no acepta su nueva realidad. Sin embargo, Lou pone un límite por el bien de los dos, y regresa a Francia con su padre para dar espacio a que Ruben pueda conciliar con calma y paciencia el proceso de sanación que requiere para salir adelante en su nueva vida.

Ruben ahora ha tenido que decir adiós a la música, a su novia, a su estilo de vida, a los sonidos. 

Pero lo recibe un tipo muy sabio, Joe (Paul Raci). Joe le explica a Ruben que el problema tiene solución, una que radica principalmente en la mente. Los problemas existen para resolverse, cuando no se puede, el problema se convierte en problemática por nuestra actitud frente al problema. Somos nuestros pensamientos. Ruben tiene que comprender un nuevo paradigma para definir a su ser. Poco a poco Ruben transita de esta incomunicación a una nueva realidad donde ya puede integrarse a una comunidad que posee las mismas características que él, y que han logrado salir adelante, y reconciliarse con su ser y con el mundo nuevamente para vivir en una nueva realidad que se construye con el resto de los sentidos que poseen para percibir el mundo. 

Ruben aprende a conectar con su interior, a lidiar con sus emociones, a comprender el duelo por el cual se encuentra atravesando. Y aprende rápido, y rápido se integra a su comunidad, y sale adelante, pero aún no acepta totalmente quedar así. Ruben posee coraje, y busca opciones para poder curar lo que ha perdido. Pero la nueva vida es una realidad. 

Ruben se rehusa a vivir plenamente en paz, y no puede eliminar su ansiedad, entre otras cosas porque quiere recuperar a su novia, su modo de vida.

Gran actuación de Mahieu Amalric, y poderosa aparición y gran interpretación magistral de Paul Raci.

Riz Ahmed presenta una poderosa actuación, en una película magistralmente dirigida por Darius Marder. Es una gran película, con excelente ritmo, impecable fotografía, edición de audio y sonido magistral. Una gran obra cinematográfica. 

Pero dentro de otras cosas, la película me ha gustado demasiado porque trata, sobre todo, del amor. El amor que ocurre en pareja, el plan divino de pronto que precede el encuentro de dos almas para poder salir adelante ó resolver un problema que tenía a alguien atorado en un momento que de pronto, pueden pasar miles de vidas y no puedes salir de ahí. Lou y Ruben se encuentran por destino, y fungen cada uno como un espejo para el otro lleno de amor, en un pacto donde se cuidarán y se amarán porque amarse es amar al otro. Este pacto, esta sinergia, este encuentro lleva a los dos a recomponer su vida y a transitar al sendero de la sanación. Ambos crecen en amor. 

Ruben había sido un adicto a la heroína, hasta poder encontrar a Lou, con quien experimentó el encuentro con el amor, misma que le inspiró a luchar por su vida, a procurarse, a cuidarse, a salir adelante, a poder decir adiós. 

Una tremenda radiografía del amor en pareja. 

—Dice el aforismo: «Tu verdadera pareja es aquella que te conduce al centro de tu propio ser.» 

—Dice la canción, «poder decir adiós es crecer». 

A Ruben, le indican que para poder ser feliz hay que transitar al espacio de la paz interna, que todos tenemos, que todos poseemos. Hay un templo interior en cada uno de nosotros al cual podemos acceder en cualquier momento, y experimentar la paz. Ruben no sabe cómo hacerlo. Este camino se trata de que profundice en su interior para que pueda realmente vivirlo. 

Es un camino de redención.

Imperdible.

Erick Xavier Huerta