Black Swan

Podría escribir hojas y hojas sobre lo tanto que me significa y lo que dice y lo que envuelve, "el cisne negro". La película que realizó Darren Aronofsky con absoluta maestría, con impecabilidad en su mirada y en tratar un guión tan hermoso de forma tan significativa. Una historia intensa que no deja en paz el alma mientras el espectador se inmersa desde el primer instante en que escucha la banda sonora dirigida por Clint  Mansell, gran música que transporta al universo del ballet, sin tomar en cuenta la melodía del baile de los cisnes, en donde Natalie Portman ennoblece a cualquiera, destruye con ese ímpetu de ver cómo su personaje busca desesperadamente la expresión absoluta de su alma, a través del recurso del baile; ella persigue su sueño, la obsesiona, la presiona ante su director, interpretado magistralmente por Vincent Cassell.
  Black Swan me mantuvo inerte, extasiado, despierto, soñando y me transportó a otro nivel y admire con gran corazón el trabajo de su director y admire con gran pasión el trabajo de los actores y me emocionó ver un guión tan hermoso. Black Swan es una película muy inteligente, muy trascendental e intensa; creo que Black Swan representa el alma del ser humano a total plenitud, creo que es una gran película y creo que todos aprenderemos y sabremos más de nuestra esencia después de ver un manejo embelesante de cámaras con un diseño de producción genial, un trabajo de arte suntuoso y, sobre todo, un  grito desesperado de un espíritu ávido de sueños.


EXHS

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