El Hobbit: La Batalla de los Cinco Ejércitos

Dirigida por supuesto por Peter Jackson. 

Escrita por Guillermo del Toro, Peter Jackson, Philippa Boyens y Fran Walsh.

No nos detendremos en discutir si era factible o no la trilogía porque ya para qué. Es así, hicieron tres películas de un solo libro, por ambición, por dinero, por crear y extender ya una franquicia exitosa. Porque es claro que no hay satisfacción, porque siempre necesitamos más, y porque no podemos dejar de ser melancólicos y nostálgicos, porque no podemos decir adiós a las cosas y cerrar capítulos y eras.

Después de la saga del señor de los anillos, Peter Jackson no había contado con el mismo éxito en sus trabajos posteriores. Por eso, luego de un break, se reunió, creo, con el más importante creador de fantasía y aventuras, Guillermo del Toro. Y creo que el mismo del Toro fue el factor para poder desarrollar una historia en una franquicia cinematográfica. Tratándose de las aventuras del hobbit, el abuelo de Frodo, Bilbo.

¿Qué pasó en esa aventura que le hizo conservar un anillo durante tanto tiempo? ¿Cuál era esa historia que provocó que Frodo tuviese un destino y heredara una cruz?

La primer película fue muy buena. La segunda entrega fue mejor. Esta tercera producción y desenlace de la aventura emprendida por Bilbo Baggins es demasiado extensa.

La batalla de los cinco ejércitos, es demasiado extensa, es la película que nos dice claramente el error de extender una película en tres partes de alrededor de tres horas cuando pudo haber sido contada en una sola, o en dos máximo.

Es una película con todo el dinero, y por eso maravillosa en su trabajo artístico. Sin embargo, carece de parlamentos memorables; yo me quedaría solamente con la última frase del rey Thorin.

Por lo demás, es espectacular sí; grandiosa en toda su producción. Cuadros memorables, eternos. Tiene un trabajo artístico impresionante; por lo que de ahí se desprende una amalgama de línea de arte en todos los rubros para sacar dinero eternamente. Pero es demasiada larga, y el maravilloso dragón que nos hipnotizó en la primera parte, no sirve para nada aquí. El dragón es un simple nexo entre la segunda y la tercera entrega; pero ya no cuenta con relevancia ni trascendencia. Y creo que matan esa gran figura y personaje de mala manera porque ya no tenemos sabor de boca ni que esperar. Y eso sucede. Muere el dragón y muere prácticamente la película. Y quedamos esperando dos horas hasta que comienza la batalla de los cinco ejércitos hasta la batalla épica de Thorin.

Y ya, no pasa nada.

Felicito a esta tercera entrega por sus maravillosos dibujos y su visión de acción, planteamiento de batallas y grandes efectos visuales.

Pero es demasiado. 

Y siempre nos quedaremos muy llenos de tanto hobbit.

EXHS